Ingredientes (6 raciones)
- 1 pollo deshuesado (los huesos para el caldo)
- 750 grs. de carne picada
- 4 rebanadas de pan de molde remojadas en leche
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de perejil
- 1 pastilla de caldo de ave
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- medio litro de caldo
- aceite de oliva
- sal y pimienta
- Para la guarnición: zanahorias y guisantes en conserva
Una vez deshuesado el pollo y reservados los huesos para preparar el caldo, lo desgrasamos y reservamos para después. Mezclamos en un bol grande la carne picada con las rebanadas de pan de molde sin corteza y remojadas en leche. Agregamos el perejil y el ajo muy picados. Mezclamos y sazonamos con la pastilla de caldo desmenuzada. Pelamos las zanahorias de la guarnición, las lavamos y secamos, para rallarlas y reservamos para después.
Salpimentamos el pollo por dentro y por fuera. Metemos hacia adentro los muslos y las alas y cosemos el hueco que dejan para que el pollo tenga una forma cilíndrica. Pelamos la cebolla y la zanahoria. Las picamos muy menudo y las reservamos para más tarde. Abrimos el bote de guisantes y escurrimos el líquido de la conserva. Formamos unos nidos con las zanahorias ralladas poniendo en el centro un montoncito de guisantes. Disponemos los nidos en una fuente de servir. Cubrimos con plástico de cocina y reservamos.
Ahora rellenamos el pollo con la preparación de la carne, sin presionar demasiado para que no quede apelmazada y no se rompa la carne del pollo. Cosemos la abertura por la que se ha introducido la carne con hilo de cocina para que el relleno no se salga. Ponemos en el fondo de una fuente que pueda ir al horno la cebolla y la zanahoria finamente picadas. Añadimos medio litro de caldo preparado anteriormente y removemos con una cuchara de madera para que todo se mezcle bien.
Atamos el pollo para que mantenga su forma durante la cocción y lo ponemos en la fuente. Lo regamos con un chorrito de aceite y asamos durante 1 hora en horno a 175º C, regando varias veces con el caldo de cocción. Comprobamos que el pollo está en su punto pinchando en el centro con una brocheta. Lo sacamos del horno y lo dejamos reposar durante 30 minutos. Lo cortamos en lonchas de un centímetro de grosor. Por último, trituramos la salsa con la batidora y servimos junto a la guarnición.
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